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Luis Castro ha sido fundamental
en la realización de obras en la que han participado poetas,
escritores y niños del mundo. También junto a las comunidades
ancestrales ha recibido
a los poetas en Cusco, celebrando las publicaciones de nuestras obras,
sin pedir nada acambio.
Las puertas de su ciudad imperial siempre se han abierto para nosotros
y se han dispuesto
los mejores escenarios para las presentaciones que hemos realizado en
conjunto con colegios,
autoridades y entes culturales de relevancia de la región andina.
En el 2018 me invita a celebrar junto a los pueblos ancestrales y las
organizaciones religiosas
y me solicita que haga un llamado para realizar el libro en su homenaje
de los
"Mil poemas a la paz y felicidad de la humanidad" obra que se
publica en los 30 días siguientes
y se presenta en la ceremonia principal en la Plaza mayor de El Cusco
con los representantes
de las comunidades religiosas y ancestrales, también es donada
a colegios y entidades
entregando el libro al representante de los budistas de Japón invitados
a esta ceremonia.
Lucho Castro también nos ha acompañado a las gestas de
César Vallejo en Trujillo
en donde se le confirió el título de socio honorario del
Instituto de Estudios Vallejianos,
Santiago de Chuco donde recibe de manos del Alcalde de la Capital de la
poesía peruana
el título de hijo adoptivo, en Chiclayo y Huamachuco acompañando
a Capulí, Vallejo y su tierra
y a poetas del mundo de Isla Negra.
Durante la presentación y donación del libro en homenaje
a Túpac Amaru en la plaza de Tinta-Cusco
recibe a poetas del mundo y al ganador del premio "Alfred Asís
2015" alumno de Cajamarca
el cual es declarado "Visita Ilustre de El Cusco" junto a los
poetas que le acompañaban.
Son múltiples las tareas de este hermano
de El Cusco en las cuales a aportado con la coordinación
junto a su hija Tania Castro para el buen desarrollo de estas las cuales
se vienen proyectando
desde el 2011 con la organización del Festival "Añay
Pachamama" por más de una semana
que unió a los pueblos en una manifestación de cultura y
baile sin precedentes
a la cual fui invitado en mi segunda visita a Cusco.
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ESPERANZA,
SOLIDARIDAD, SERVICIO=AMOR
Cusco, 21 de abril del 2020
Queridos amigos y hermanos:
Con inmenso amor me dirijo a todos ustedes para compartir un testimonio
de lo que siento y vivo al sentir y vivir lo que todos estamos sintiendo
y viviendo a cusa de esa invasión de bichitos que han puesto a
la humanidad cara a cara con la muerte. Nos han humillado, han enterrado,
junto a los miles y miles de cadáveres que ya han cobrado, toda
la soberbia de los hombres y han dejado al descubierto su infinita pequeñez
y vulnerabilidad. Nos creíamos reyes y dueños del universo
y de la vida. No somos dueños de nada. Ni siquiera de la nada.
Frente la pandemia muchos tenemos miedo. Algunos incluso pánico.
Nuestras vidas se han sumido en una confusión tormentosa. Muchas
viejas preguntas inundaron nuestras mentes. En mi caso para salir de ese
pantano rebusqué algunas enseñanzas de amados maestros.
A renglones seguidos transcribo algunas respuestas que obtuve. Con una
sonrisa de niño iluminando mi rostro las comparto fraternalmente.
Espero que les sean útiles. Espero también que ante todo
esto nos preguntemos: ¿Qué haremos? ¿qué podremos
hacer? ¿qué deberemos hacer? para construir y vivir un mundo
mejor que el que ha quedado al descubierto. Tiene que ser distinto. Aportemos
al surgimiento de una nueva utopía compartida.
Que por lo menos se respete el derecho a la libertad de culto. Que no
se nos siga imponiendo el dios dinero y toda su institucionalidad que
nos condena al consumismo y endeudamiento: Banca, mercados, tarjetas de
crédito, industrias farmacceúticas, de la guerra “alimentarias”
y demás empresas que lucran a costa de la destrucción de
la vida en todas sus formas. No más gurúes que hacen apología
de ello. Construyamos un mundo que rinda culto a la vida.
Un abrazo,
Lucho Castro García.
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Diálogo con el Amauta:
Aprendiz: Maestro ¿qué es la muerte?
¿Debemos tenerle miedo?
Amauta: ¿Miedo? El miedo es la falta de amor
Aprendiz: ¿Pero, qué es la
muerte?.
Amauta: La muerte es el nacimiento a otra vida… El retorno a la
Casa grande... Un hilo transparente ata la vida a la muerte y ella está
siempre ahí; donde sea que vayas, la muerte va a tu lado, mas no
para amedrentarte, sino para recordarte que hoy toca vivir, saborear intensamente
este instante, pues cualquier día, donde sea que estés,
este instante será el último.
Aprendiz: Saborear intensamente este instante, vivir ahora …en otras
palabras, que a pesar de todo ser felices… Perdone maestro pero
¿cómo ser feliz en un mundo tan injusto, ahora más
que nunca tan amenazado por la muerte?
Amauta: ¿Cómo es posible ser
infeliz en un mundo tan hermoso? ¿Cómo es posible olvidar
que la vida es un precioso regalo?
Aprendiz: Indiscutible: La vida es un precioso regalo que despilfarramos.
Pero ¿cómo percibir la hermosura del mundo como usted la
percibe?
Amauta: Precisamos encarnar la ternura, dejarnos seducir por la
plenitud, estar disponibles a la vida plena…
Aprendiz: Maestro creo que todos estamos disponibles para esa vida, mas
¿cómo conocerla?
Amauta: Sólo conoce la vida quien atrapa cada instante, porque
la vida es sólo un instante. Al saborear el instante la plenitud
se apodera de nosotros, ahí comienza el conocimiento de la vida.
Mientras los hombres del mundo Civilizado se ocupan de hablar de la vida,
nosotros nos ocupamos de vivirla…
La vida es una cita sagrada.
Aprendiz: ¿Cuándo acudir a esa cita? ¿cuándo
comenzar esa vida plena?
Amauta: Tu vida plena comienza cuando tu mano deja el perfume del Amor
en todo lo que toca, cuando tus pasos acarician descalzos la piel de Pachamama…
Entonces sientes que todo es uno, que todo está vivo, que es parte
de una maravillosa danza cósmica. Y si vivimos en armonía
con la creación al morir nos vestiremos de Pachamama.
Aprendiz: ¿Pachamama? ¿Y qué es o quién es
Pachamama?
Amauta: Pachamama es todo. Pachamama no es sólo la tierra. Pachamama
es mi madre, el viento es su aliento, wayra es mi hermano… Cuando
veas a la Pachamama que hay en ti, comprenderás todos los secretos
del Universo.
Aprendiz: Maestro háblenos más explícitamente de
Dios Amauta: Nosotros no hablamos de Dios, Dios no es algo para hablar
de Él, Dios es para vivenciarlo cotidianamente a través
de la vida que emana de Él.
Aprendiz: Hay quienes enseñan que siempre debemos buscar a Dios.
¿Dónde buscarlo?
Amauta: Dios está en todas partes, también está aquí.
Busquen a Dios en los corazones y no en los templos. El corazón
es la puerta de entrada a la otra realidad. Si esa puerta está
cerrada nuestro ojo profundo no puede ver a Dios en un niño, un
mendigo, un árbol…Somos incapaces de ascender a la Sagrada
montaña, extasiarnos con un amanecer o hablar con uma flor. No
podremos servir. El servicio, más que la devoción, nos acerca
a Dios
Aprendiz: Maestro gran parte de la humanidad lejos de buscar a Dios o
servir, busca y rebusca el dinero, la riqueza y en vez de servir se hace
servir .
Amauta: Quien no vive para servir no sirve para vivir…No es posible
estar vivo y simultáneamente estar corriendo, como loco, en el
carrousel del consumismo. Al estar todos de paso, no nos carguemos de
mucho equipaje.
Mi mayor riqueza es que no aspiro a ninguna riqueza, excepto a la de tener
el corazón, lleno de Amor. Somos ricos estamos enamorados de la
vida.
Aprendiz: ¿Quién fuera tan sabio como usted?
Amauta: Serás sabio cuando puedas disfrutar de todo lo que te pase,
absolutamente de todo.
Aprendiz: Se dice: Errar es humano. Todos los hombres caemos en el fango
de los errores, pero todos, o casi todos, no somos capaces de reconocerlos
y menos de enmendarlos.
Amauta: Sólo el sabio reconoce sus errores, sólo el sabio
comprende que el aprendizaje es un viaje que nunca termina.Vivir es aprender.
Quien cree que ya lo sabe todo, realmente no sabe nada… Déjame
decirte algo más: Pachamama recicla nuestros errores y los convierte
en flores si honestamente nos levantamos y aprendemos de nuestras caídas.
Aprendiz: Pero maestro…
Amauta: No, no… Ya no más peros ni más palabras…
Todo es mentira sino se origina en vivencias profundas.
¡Basta de seguir hablando, es hora de vivir!
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